Experiencia:
“Lunes, 29 de marzo de 2021.
Me he empezado a dar Reiki como suelo hacer todas las mañanas nada más despertar, hoy sin más, después de empezar con el Reiki vi que me proyectaba hacia el techo y mi mente, enseguida telepáticamente me dice… ¡estoy fuera! 🤣
Supe controlar la euforia. —En otras ocasiones esa euforia me devolvía al cuerpo y no podía disfrutar del viaje—. Noté mucha calma y me sentí como acompañada en ese viaje ya que, yo antes de la sesión de Reiki, empecé a proyectar en mi mente una intención, y la verdad es que funcionó pues me sentí acompañada en todo momento. Quiero decir que no vi nada, pero lo sentía todo.
En este viaje también tuve la oportunidad de experimentar y decir dónde quería ir y sucedía sin rapidez y sin cosas raras, todo fue muy armonioso. Como he dicho anteriormente, no sentí miedo en ningún momento. Esta vez vi el pueblo donde me crie de pequeña y lo que me sorprendió es que, en el viaje era todo como aquí (aunque los colores algo más resaltados), lo fascinante, aparte de vivir esto es que me sentía como en un video juego, me refiero a la forma de desplazarme, 🤣 era como volando y solo me veía las manos. La verdad que es una experiencia para repetir. Esta vez, como en alguna anterior, tampoco note ruidos ni parálisis al salir y al entrar en el cuerpo. 🥰 Estoy feliz de mi progreso, feliz de ser cada vez más consciente, feliz de ser. 😜 Gracias 🥰 Alberto por tu curso, tres años de aprendizaje y resultados. Gracias”.
Inma
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Comentario:
Inma, utilizaste uno de los momentos más intensos y determinantes a la hora de realizar una proyección de la conciencia. Justo al despertar, sin haberlo hecho del todo. —Denominado hipnopompía, la sensación es de ser consciente de despertar sabiendo que aún se está dormido—. Justo en este momento decides expandir las energías haciendo reiki para ti misma. La conciencia responde de inmediato liberando su cuerpo astral y te lo hace saber con serenidad. Esto no se produce sin que antes hubiera el firme propósito e intención de hacerlo y por supuesto de estar acompañada por tus amparadores.
Una vez proyectada el pensamiento es acción y disfrutas de la experiencia que, en ocasiones, quizás como esta, sea del tipo recurrente. Quiero decir que la conciencia te hace recordar vivencias del pasado que en el momento presente podrían serte de ayuda. Precisamente en este tipo de proyecciones la salida se produce muy rápido y no se perciben los síntomas típicos: ruidos, zumbidos, parálisis del sueño, estado vibracional, etc… La fuerte expansión de las energías provocada, en tu caso con reiki, permite que el retorno sea también muy sutil y sin las típicas y normales alteraciones en la respiración, ritmo cardiaco o sudoración, claros indicadores de la proyección, no así la fuerte pero sutil intensidad vibracional con la que probablemente despertaste del todo.
Un fuerte abrazo y gracias por compartir tu experiencia.
Alberto José Sánchez
Director de CienciasEvolutivas.com
Instructor de viaje astral
__Relato proyectivo nº 20__
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